Cupcakes: 12 — Tiempo de horneado: 22 minutos a 350°F
Hay días en los que uno quiere comerse algo dulcito y fácil de hacer. O bien, hay que llevar un postre a algún evento, o debemos gastar “sobrantes” de otras recetas antes de que sea demasiado tarde. Entonces abrimos la despensa y vaya, la vainilla parece aburrida, el chocolate muy pesado, lo frutal muy trabajoso… qué hacer… qué hacer… ¿cómo encontrar un intermedio?
Por lo general las recetas de chocolate utilizan café negro para darle color al queque y un poco de chocolate para hornear/derretir, lo que hace al queque delicioso, pero pesado. Así que para esos días en los que apenas se quiere degustar un poco del aroma a cacao, lo único que vamos a añadir a nuestra mezcla básica es eso: cacao en polvo para hornear y nada más.
INGREDIENTES Y PROCEDIMIENTO
- 1 barra de mantequilla
- 1 taza de azúcar granulada
- 2 huevos grandotes, (agregue 1 más si es que si no tiene huevos grandes xD)
- 1/2 taza de leche (puede poner un poquito más si ve que la mezcla está muy seca)
- 2 tazas de harina
- 2 ctas. de polvo para hornear
- Pizca de sal
- ¼ de taza de cacao en polvo
Cremar la mantequilla y el azúcar. Cernir la harina, el polvo para hornear, la sal y el chocolate.
Una vez que la mantequilla este cremosa, agregar los huevos (un huevo cada minuto, para que se integren bien). Agregar los materiales secos y la leche en velocidad mínima, (no batir más de 2-3 minutos).
Preparar la bandeja de cupcakes con sus canastitas de papel y hornear durante 22 minutos.

Para esta receta yo ya tenía un sobrante de ganache de chocolate blanco y oscuro, los cuales simplemente puse a batir en velocidad intermedia (cuando se bate el ganache de chocolate, se hace un delicioso lustre).
Luego basta solo elegir su boquilla favorita y decorar a los pequeños retoños.
¡Si es posible hacer un postre rápido, ligero y delicioso!
-Mau